Tengo otra pregunta, que puedes creer se relaciona con la anterior, y es probable que estés en lo correcto, pero no tengo planeado darte esa satisfacción, por lo que aunque la pregunta se relacione con la anterior, negaré que dicha relación existe... si es que llega a existir, despues de todo, siempre te he considerado, querida/o lectora/o como alguien con muchísima imaginación e ingenio.
¿Qué es peor: odiar aquello en lo que se trabaja o trabajar en algo que se odia?
Y antes de que me comentes la poca consistencia de la pregunta, te ruego la leas una vez más y le des al menos dos o tres vueltas en tu mente.
¿cómo...? ¿qué la pregunta sigue siendo incosistente?... pues que tienes razón, déjame reformularla...
¿Qué es peor: empezar a odiar un trabajo que amabas o empezar a amar un trabajo que odiabas?
Esta vez si te pediré encarecidamente que leas con calma la pregunta, porque tu respuesta, que puedes dejar para ti o comparitla, dirá mucho de tu forma de ver las cosas y la vida en general.
Pero la verdadera pregunta es ¿por qué planteo la pregunta?, pues porque me he visto en la problemática -y con esto te doy la razón al creer que la pregunta se relacionaba con la planteada en la entrada anterior... muy a mi pesar- de que estoy, desde cierto punto de vista, empezando a disfrutar de mi nuevo trabajo. Lo que me parece francamente injusto, porque se me ha arrebatado el inherente derecho de todo ser humano de odiar su trabajo. Linda cosa, ahora resulta que mis dos trabajos me gustan, uno más que el otro por su puesto.
Necesito otra semana para evaluar bien la situación.
Pasando a otro plano (en este momento quien escribe se pone de pie, abre un agujero interdimensional, lo traspasa, vuelve a sentarse y continúa escribiendo), el mi blog novela hay una nueva entrada. Es relativamente breve, pero era necesaria.
Te recomiendo que la leas, la entrada en si... y la "novela" para que no te quedes en el aire con lo escrito.